Según el Dr. Greg Rose y Dave Phillips del Titleist Performance Institute (TPI), para lograr un swing de golf lo más efectivo posible debemos poseer dos cosas: Movilidad y Estabilidad.
La movilidad es la combinación del rango de movimiento articular y la flexibilidad muscular. Esto es necesario para una mecánica correcta y para prevenir las lesiones. La movilidad permite generar energía elástica, y por lo tanto, establece una base para poder generar potencia.
La estabilidad se define como la capacidad del sistema para mantenerse sin cambios o alineado frente a otros cambios o fuerzas externas. La estabilidad se consigue con la combinación de estas tres cosas: Equilibrio, fuerza y resistencia.
Si quieres mantener un arco y la flecha estables mientras tiras de la cuerda hacia atrás, debes tener buen equilibrio, fuerza y resistencia muscular. Este mismo principio se aplica para crear un swing de golf potente. La capacidad para mantener una parte del cuerpo fija mientras estiras y contraes segmentos adyacentes nos va a permitir generar velocidad y mantener una postura consistente durante el swing. Esto es estabilidad.
El cuerpo trabaja en una secuencia alternativa de estabilidad y movilidad. Si se altera esta secuencia ocurrirá una disfunción y compensación.
Secuencia normal:
Pie- Estable
Tobillo- Móvil
Rodilla- Estable
Cadera- Móvil
Pelvis- Estable
Columna torácica- Móvil
Escapulo torácica- Estable
Hombro- Móvil
Codo- Estable
Muñeca- Móvil
Columna cervical- Estable
Tener acceso a un entrenador de golf que sepa identificar esta secuencia en el swing de un jugador es clave para la mejora de los movimientos y la prevención de lesiones.
Si trabajamos la estabilidad es bueno hacer ejercicios con una pierna y movernos lo que podamos, ayuda un montón
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