miércoles, 2 de marzo de 2011

CLASES DE GOLF-EL APRENDIZAJE: LA REVOLUCION DE LA CELULA DE LA PRÁCTICA DELIBERADA

¿Cómo aprendemos? ¿Cómo pasamos de la ignorancia a la sabiduría?, y lo que a nosotros nos interesa, ¿Cómo conseguimos un swing de golf funcional y repetitivo?

Empezamos con tres simples datos:

1. Cada movimiento humano, pensamiento o sentimiento es una señal eléctrica precisa que viaja a través de una cadena de neuronas- un circuito de fibras nerviosas.

2. La mielina es una sustancia que cubre estas fibras nerviosas y aumenta la fuerza, velocidad y precisión de la señal

3. Cuanto más disparamos un circuito en particular (por ejemplo un swing de golf), mas mielina optimiza ese circuito y nuestros movimientos y pensamientos se hacen más fuertes, rápidos y fluidos.


¿Por qué el entrenamiento basado en los movimientos correctos es tan efectivo?

Porque la mejor manera de construir un circuito (un swing de golf) es disparándolo, rectificando el movimiento y disparándolo otra vez, otra vez y otra vez. La repetición no es una opción, es una necesidad biológica para aprender.

¿Por qué la pasión y la persistencia son ingredientes básicos para el éxito de un buen movimiento?

Porque formar mielina alrededor de un gran circuito requiere tiempo y energía. Si no te gusta la actividad que realizas nunca entrenaras lo suficiente como para tener un movimiento repetitivo.

Pero la mielina no es la única protagonista de esta historia. La práctica deliberada (aquella con el sistema de entrenamiento correcto, el entrenador adecuado, concentración y dedicación) construye nuevas conexiones neuronales y aumenta el tamaño de secciones especificas del cerebro.

Construir un swing de golf requiere paciencia y constancia, pero además, para que nuestro swing de golf llegue a ser efectivo tenemos que utilizar un sistema de entrenamiento y un entrenador que nos ayude a ensayarlo de forma correcta.

¡Por eso es tan divertido el golf! El golf es un deporte que reta a nuestra mente, que te hace mas inteligente y ágil, y eso hace que nos enganchemos a él y no lo soltemos.

Un saludo

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